Alex Gómez.
Ahora que se hace un completo despapaye con los resultados de las pasadas elecciones, queda claro que dos compitas son netamente inamovibles y por ello estuvieron, hasta cierto punto, ‘despreocupados’ por lo que pudiese suceder.
Del titipuchal de impugnaciones que se dieron en Chiapas, tanto Mario Antonio Guillén Domínguez (Comitán) como Iván López (La Independencia) fueron de los pocos que no recibieron carrilla o llamadas preocupantes que pusieran en riesgo sus actas de mayoría.
Ya es de todos sabido el jugueteo que se ha dado en municipios como Las Rosas, Frontera Comalapa o San Cristóbal, sólo por mencionar algunos, donde les dijeron a los electos que sí, luego que no y luego que siempre sí otra vez pero que no se confíen.
Y mire que al vaquero cositía sí que le quisieron hacer bulla galana pues hasta se unieron varios candidatos que perdieron la elección para querer exhibirlo.
Incluso dicen las malas lenguas que uno de ellos, Jorge Constantino Kanter, fue el más movido para que, por lo menos le metieran un susto electoral al nuevo presidente de Comitán.
Desde un principio se vio a Mario seguro, caminando, sentándose con actores políticos, secretarios del gabinete estatal y unos picudos a nivel nacional.
Allende en la CDMX se le vio en los pasillos de San Lázaro e incluso echando visitas a la Cámara de Senadores.
Algo similar sucedió con el compita Iván López, quien prácticamente se la ha llevado de a muertito desde que ganó.
Tal vez fue la victoria más aplastante de todas y debido a ello podría decirse que fue de los contados municipios donde no hubo pleito post electoral.
En todos los demás continúa el circo político con aquellos que nomás no terminan de dormir tranquilos por las determinaciones de las autoridades electorales a nivel estado que después son reviradas por las del nivel federal en salas regionales.
Y hasta hay municipios, ahora mismo, donde no hay presidente municipal y vaya usted a saber qué va a suceder con la administración de los recursos.
Así que guste o no, les caiga bien o no, lo hecho por el Sr. Fox e Iván López en sus municipios les ha dado lo suficiente como para que estén tranquilos, caminando por otros frentes en lugar de preocuparse por otras cosas.
A los demás, no les quedará más que seguir rezando a todos sus santos y dioses, así como seguir insistiendo en los teléfonos de sus padrinos políticos para buscar hacer más bulla o en una de esas, tener un ‘hueso’ para que se queden quietos.
No por nada se han hecho harto ‘compadres’ ese dueto de presidentes electos como para armar algo hacia el futuro que, ojalá, sea también en beneficio de sus respectivos municipios.
Porque ahora que se hace un completo despapaye con los resultados de las pasadas elecciones, queda claro que dos compitas son netamente inamovibles y por ello estuvieron, hasta cierto punto, ‘despreocupados’ por lo que pudiese suceder.
COMALAPA, FOCO ROJO
Al Gobierno del Estado no le puede seguir saltando la liebre en materia de seguridad.
Y si por fin quiere poner orden, debería empezar por Frontera Comalapa donde las cosas se ponen muy pero muy complicadas.
De hecho, se ha llegado al punto donde se bromeaba en las oficinas de la CDMX con políticos chiapanecos sobre la ‘fiesta’ que se traían en el municipio, a preocuparse realmente por lo que sucede.
Para nadie es un secreto que la zona fronteriza de aquel municipio y comunidades aledañas, prácticamente dan miedo ahora.
Antes usted tal vez podría disfrutar echar su vuelta por La Mesilla (Guatemala) o bien irse a echar su nadada en los Lagos de Colón, pero ahora mismo, con todo lo que ha sucedido, son pocos quienes lo recomiendan.
Chamic ha estado en el ojo del huracán últimamente, así como también la cabecera municipal de Comalapa.
Entre personas levantadas, balaceras e incluso la presidencia municipal quemada hace poco, no se ve por dónde alguien pueda poner orden.
Y ahí es donde entra el Gobierno del Estado pues le han estado revirando la imagen de ‘estado seguro’ cada que quieren.
Sale el gobernador a decir que se avanza en el combate de la delincuencia organizada y al siguiente día se presenta una balacera en esa zona.
Sale el gobernador a decir que las mesas de seguridad han funcionado para dar garantías a la gente y al siguiente día sale nota de Comalapa con persona ‘levantada’.
Así se la han llevado y obviamente algo se tendría que hacer para mantener las cosas con cierto orden.
Y, como si algo faltara, súmele el tema migrante que cada día es más álgido (aunque de eso hablaremos en otra ocasión).
Urge que la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Ciudadana fortalezca sus estrategias en ese frente.
Pero también debe intervenir, ya, la Guardia Nacional con esa supuesta autorización para responder en caso de violencia.
-Recuerde que dicen las malas lenguas que si habían sido exhibidos por algunos grupos era porque no tenían autorizado ejercer la fuerza pública, aunque ahora ya lo harán.-
Porque sí urge que se vea mano de autoridad o por lo menos intensión de bajarle dos rayitas a la violencia generada en aquel municipio bonito y hermoso pero que ahora mismo, pocos quieren visitar.
ALTAMIRANO, OTRA VEZ
Altamirano es otro municipio que podría salirse de control.
Aquel lugar cobró mucha relevancia en el mapa por el titipuchal de broncas que se dan cada poco, aunque últimamente las cosas se habían tranquilizado.
Todo terminó cuando ejidatarios se pusieron rebeldes pa echarle fuego a una patrulla y a la misma presidencia municipal.
Ocurre esto a días del inicio de un nuevo trienio, lo que podría interpretarse como fuego amigo hacia la nueva administración o bien un mensaje indirecto sobre la gobernabilidad que se necesitará para llevar la fiesta medio en paz.
De momento, aquella tranquilidad que medio se respiraba en Altamirano murió al calor del fuego.
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