LA REALIDAD EN LA QUE ESTAMOS SUMIDOS

Opinión Segundo Guillén.

Al presidente lo alcanzó Chiapas o dicho de forma más clara, la realidad en la que estamos sumidos miles de chiapanecos con necesidades diversas que buscamos trasladarnos de un punto a otro en la geografía chiapaneca, desde hace varios años, y es que en nuestro Estado todos los días sin excepción la pregunta matutina vuelta tradición es ¿Hay paso hoy? ¿Está bloqueada la carretera?
Somos un Estado cansado de la falta del Estado de Derecho, de observar a sus autoridades como meros espectadores ante los atropellos de unos cuantos a la población en general, un Estado cuya articulación de los cuerpos de seguridad en sus tres niveles de gobierno ha servido únicamente para la práctica del deporte burocrático, de tirarse uno a otro la bolita de su intrínseca responsabilidad, un Estado donde las siglas de los sindicatos, organizaciones sociales o grupos de chantaje pesan más que la de las instituciones como ente público, un Estado donde el sector productivo encuentra mayor consuelo en estas últimas ante la ceguera y sordera que padecen quienes deberían aplicar la ley.
En su arribo a esta tierra, al presidente le tocó quedarse en su camioneta y desayunar no unos buenos taquitos casablanca con un frío Pozol, le tocó como a muchos de nosotros, desayunar bilis y coraje derivado de la impotencia, y si esto le hicieron también al Presidente de la República, entonces nosotros aquí, ya no tenemos mucha esperanza.
El presidente está en Chiapas, estará en tierras comitecas conmemorando los 200 años del grito independentista que dio origen a la voluntad de esta región riquísima del sureste mexicano a confederarse a la República, ojalá que quienes lo acompañen no se desvivan en zalamerías y discursos sobre héroes del pasado y se enfoquen en aprovechar la coyuntura para solicitarle presente y futuro, como la continuación de la súper carretera de CD Cuauhtémoc (la frontera) a Comitán y de aquí hacia San Cristóbal truncada en Amatenango, ocupamos también ser considerados en el decreto presidencial que disminuyó la tasa del IVA e ISR, y que si benefició a otros municipios aledaños a nuestra cabecera, ojalá que quien tenga oportunidad de dirigirle unas palabras lo haga con el espíritu de nuestro prócer Belisario Domínguez, y le manifieste que Comitán es centro y corazón de una región muy basta, un punto de abasto estratégico para temas como la salud, por eso alguien debería decirle que se necesita una mejor infraestructura hospitalaria, un IMSS más acorde a las necesidades de nuestros pueblos y que después de 40 años han cambiado muchísimo, necesidades que van más allá de paracetamol y un triste edificio deficiente y pausado en el tiempo, alguien debería decirle al presidente que agradecemos que voltee al sureste, que nos sentimos animados de su cariño por nuestro Estado, pero que necesitamos acciones que vayan más allá de una estación de tren en Palenque, necesitamos en el Estado, y en la Meseta Comiteca, decisiones estratégicas para que poco a poco salgamos de las más desalentadoras cifras y mediciones de pobreza y marginación para meternos de una vez a las vías del desarrollo, esa sería una cuarta transformación… porque en Chiapas después de todo el choro y la politiquería en eventos públicos, ya lo tenemos de sobra.