DESPLAZADOS: UN CUENTO DE NUNCA ACABAR

Intolerancia religiosa y diferencias políticas, causas principales de desplazamientos en Chiapas.

Paula Cancino.

En los últimos días, Chiapas ha sido el centro de atención por los hechos violentos acontecidos en el municipio de Pantelhó, a raíz de los cuales cerca de 3 mil personas fueron forzadas a desplazarse de sus hogares por el temor a ser atacadas de nuevo, sin embargo, el desplazamiento por diversos motivos ha estado presente en las últimas 4 décadas en nuestro estado.

Entre los años 70 y 90, la principal causa de los desplazamientos fue la intolerancia religiosa así como también fenómenos ambientales derivados en desastre; pero el incremento en este fenómeno ocurrió a partir del levantamiento armado del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) en 1994, siendo estas personas las más afectadas al tener que abandonar sus hogares a raíz del conflicto armado entre los llamados zapatistas y el gobierno federal que comenzó a mediados de los años noventa, principalmente en las zonas selva y altos de Chiapas.

Fue en ese año cuando miles de personas se vieron obligadas a abandonar sus comunidades a causa de los enfrentamientos y la violencia generalizada provocada por los enfrentamientos entre el EZLN y el Ejército Nacional, además de conflictos intercomunitarios derivados de diferencias políticas.

Precisamente el desplazamiento de la población por motivos políticos, ha sido una condición que permanece hasta hoy en día en muchas de las comunidades indígenas del Estado que al mezclarse con diferencias religiosas; deriva en hechos violentos con resultados lamentables, como el último ocurrido en la comunidad Mitzitón, en el municipio de San Cristóbal de las Casas.

Así también entre los municipios de Chenalhó y Chalchihuitán, existe un problema añejo de disputa por límites territoriales, situación que recrudeció en el 2018 dando como resultado a mil 237 personas en desplazamiento forzado, que conforman 282 familias, en 10 comunidades del municipio de Chalchihuitán, pues los ataques con armas de fuego, realizados por un grupo civil armado de corte paramilitar procedente de Chenalhó, persisten durante el confinamiento por emergencia sanitaria de Covid, según documenta el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de Las Casas, A.C. (Frayba).

Entre estos datos, destacan los de un estudio realizado por la ONU y el Instituto Mora, calcula que hasta marzo del año 2011 había en Chiapas 25 mil 671 desplazados, cifra que al día de hoy se estima puede llegar a más de 30 mil; esto equivale a unas cinco mil 320 familias que fueron apartadas de su lugar de origen o residencia por motivos de violencia.

Es importante mencionar que según el ACNUR (Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados) a finales de 2014 había 59.5 millones de personas en esta situación por todo el mundo, lo cual constituye la cifra más elevada desde la Segunda Guerra Mundial: un total de 19.5 millones eran refugiados; 1.8 millones se encontraban en asilo humanitario y 38.2 millones constaban como desplazados internos.