Alex Gómez
Basta, basta, basta de los asesinatos perpetrados por organizaciones.
Una familia se queda sin sustento y una pluma comiteca con aspiraciones y humildad se ve apagada por la imprudencia, una vez más, de esos grupos delincuenciales.
Es inadmisible que, por pertenecer a una organización social, un imprudente en estado de ebriedad que atropelló a un reportero en Comitán y lo privó de la vida, sea remotamente considerado para salir en libertad.
A ese imberbe hay que aplicarle todo el peso de la Ley, porque ya fue suficiente de la impunidad a esos grupos sociales.
Mañana o pasado, un grupo de personas violentas bloquea los accesos y toma la Fiscalía en Comitán para que en horas o días liberen a un asesino.
Eso no puede seguir sucediendo ni en Comitán y mucho menos en Chiapas, donde vivimos en la incertidumbre por todo.
A ese hijuesú esperamos que lo veamos sentenciado por varios años y que sirva de ejemplo para los demás.
Porque la justicia en Chiapas ya no es negociable, no puede estar a expensas de los intereses de unos pocos que dejan en el camino la vida de jóvenes que sólo buscan llevar un poco de pan a la mesa y verdades a los medios de comunicación.
Desde este espacio, la total condena a lo sucedido y la exigencia a las autoridades para la aplicación de la Ley.
A la memoria de Ángel, compañero del gremio, de pocas palabras, pero mucha pasión por su trabajo y ansiedad de crecimiento.
Basta, ya baaaaasta.
COMENZÓ LA TRANSICIÓN
No fue la votación histórica del pasado, pero los cositías eligieron a Mario Antonio Guillén Domínguez y ayer comenzó la transición.
El vaquero cositía se mostró cortés políticamente ante uno de los gobiernos más grises de la historia comiteca en el inicio de la transición.
Obviamente que hay esperanzas por ver un verdadero cambio de un presidente que repite en el cargo.
Durante su campaña y en su celebración de victoria, el Sr. Fox se mostró más maduro, con mejores ideas y una actitud de cambio.
Sin embargo sabemos que Comitán viene también con muchos compromisos y ahí donde falló en el pasado, esperamos que no falle hacia el futuro.
Es claro que hay un reto enorme y los cositías no sólo pedirán sino exigirán resultados inmediatos.
Pero del mismo modo, el gobierno entrante los necesita para ganar credibilidad porque recordemos que una administración que se vendió como la Cuarta Transformación sólo resultó en una mera mella de maquillaje y nada más.
La transición inició y, ahora sí, oficialmente el trienio de la 4T va de salida, mientras un vaquero comienza a tomar posesión.
AMLO, EL PROVOCADOR DE CHIAPAS
Hace muchos años, el movimiento zapatista en Chiapas surgió ante la ineficacia pero también provocación de un gobierno.
Hoy, pareciera que Andrés Manuel López Obrador sigue montado en sus creencias y ‘verdades únicas’ para dedicarse nada más, desde la comodidad de su gobierno, a la explosión social en Chiapas.
El caso de Los Machetes (ese grupo armado surgido en Pantelhó) sigue dando muchísima polémica.
Pero si nos vamos a la esencia del caso y si coincide conmigo, ese grupo surgió por la ola de atropellos que la gente sufría.
Y por atropellos, lo mínimo era ser desplazados por otros grupos fuertemente armados y obligados a dejar todo lo que tenían tan sólo por tener, por ejemplo, otra ideología religiosa.
Sin embargo, ya sabemos que AMLO tiene otros datos, como siempre, y para él (recuerde que es su verdad y la de nadie más) este movimiento social es político.
De hecho, los acusó de delincuentes y como un “pleito de caciques”, lo que no contribuye en absolutamente nada a la solución de fondo en un conflicto.
Incluso, el presidente de todos ustedes se aventuró a decir que ante la inseguridad no se pueden tomar las armas para defenderse.
Ese es el gran problema de darle un micrófono a los políticos que no tienen problemas y viven en una burbuja desinformada de aduladores que les dicen que todo está bien.
Porque bastaría que estuviese un día en una de las zonas indígenas de Chiapas, sin toda la protección que trae, para darse cuenta de la triste realidad que viven.
Por ejemplo: Chiapas pasó de ser un estado pobre a uno más pobre, el rezago se ha resentido aún más en los últimos años.
Los grupos indígenas sufren discriminación hasta de sus propios paisanos y si no me cree, basta con ver el gran desastre que provocó el que un pastor indígena visitara a su madre en una comunidad que establece el catolicismo como religión.
Basta con que estuviese un día donde, a punta de pistola, corren a personas de sus casas, matan a sus jefes de familia.
Imagínese que en zonas indígenas de Chiapas las mujeres que ganan una presidencia municipal son corridas y aquellos que son hombres mueren asesinados.
Es por ello que ante el comentario nada adecuado del presidente de todos ustedes, grupos tzotziles inmediatamente apoyaron la creación de esas ‘autodefensas’ y es ahí donde se puede armar la bronca.
Si bien AMLO tiene su fortaleza política en los grupos indígenas y los más vulnerables, acciones como esa sin duda alguna le merman la imagen y la fortaleza como presidente del cambio, de los pobres y los más desprotegidos.
Así entonces, o el presidente tiene la brújula verbal y política completamente descompuesta, o bien sus declaraciones son con la clara intención de emproblemar a un ya de por sí emproblemado Gobierno de Chiapas que no controla absolutamente nada.
Porque ya le dije que un pichito político consentido del presidente anda en el estado quejándose que no se le ponen a las órdenes.
Por ello, pareciera que Andrés Manuel López Obrador sigue montado en sus creencias y ‘verdades únicas’ para dedicarse nada más, desde la comodidad de su gobierno, a la explosión social en Chiapas.
Escríbame a letra.capitalcomitan@gmail.com