Alex Gómez
Feliz cumpleaños Comitán.
Lástima que en la actualidad te traten tan mal quienes pueden tratarte tan bien.
Sí, eres una ciudad que celebra un año más, eres una ciudad que ha dado mucho a Chiapas, pero que en los últimos años has caído en las peores manos que pueden ponerte: las manos políticas.
Comitán ayer estuvo de ‘fiesta’, aunque lamentablemente hay poco o nada qué celebrar con la realidad en la que vive.
De regalo le dieron inseguridad, le dieron la más grave crisis de salud y como regalo principal le regalaron un gobierno inoperante, con nula idea de administración y viviendo una crisis terrible.
Comitán merece más, mucho más, aunque lamentablemente es una frase que usan más los políticos para hacer campaña que para aplicarla a la realidad.
Merece que su vida sea regresada, que su visita sea libre y una experiencia agradable, merece que sus calles tengan luz, que su gente camine por la ciudad sin miedo a nada.
Comitán no está, ni cerca, de donde debe estar en todos los rubros mientras que otros municipios sí que han avanzado.
A Comitán sin duda alguna le han quedado a deber, se ha permitido que las organizaciones tomen control de todo, se ha dejado que el Comitán cultural haya sido abandonado y tengan que venir otras personas para buscar rescatarlo.
Se ha llegado incluso al grado que tienen que ser los ciudadanos quienes busquen su rescate cuando la autoridad municipal, con todas sus facultades, ha tenido una cerrazón en todo sentido.
Comitán sufre y por ello en su cumpleaños hay poco o nada qué celebrar, porque sus calles están destruidas, su realidad está manchada y no parece que haya alguien de aquellos que juran y perjuran amar al municipio que de verdad demuestre sus acciones.
Feliz cumpleaños Comitán, qué triste que te celebren así.
¿MEDIDAS PAREJAS?
El Ayuntamiento de Comitán decidió el cierre, otra vez, de varios espacios públicos.
Sin embargo, hay molestia y muchísimas dudas por saber si las medidas serán parejas o bien serán nada más acciones que afectarán a los ya de por sí afectados.
Me explico: anunciaron que, por estar las cosas como están, de nueva cuenta se van a restringir actividades.
De hecho, ya puede usted ver que en los parques hay listones que restringen su acceso y, además, han mandado el oficio a las ligas deportivas de cancelación de actividades.
Y, si lo miramos en perspectiva, qué bueno porque es inocultable que la situación con el Coronavirus ha empeorado.
Pero ahora bien, en los detalles está el problema del asunto y en la ejecución de las medidas es donde comienza la molestia.
Porque para la gente no es aceptable que se restrinja la actividad deportiva mientras que otras continúan a todo lo que dan.
No es posible que se limite el ejercitarse a la gente cuando a las orillas de la ciudad las cantinas donde venden carne de la que no se come están con todo.
No es posible que usted no pueda ingresar a un parque (solo para pasar) pero los antros están abiertos, vendiendo alcohol a todo lo que da y nadie les diga absolutamente nada.
Insisto y que quede claro el tema: no está mal tomar medidas, de hecho qué bueno que lo hacen; lo malo es no aplicar esas medidas donde se debe y ser tremendamente estrictos en otros frentes.
Analicen bien la situación y verán cómo todo funciona mejor.
GOBIERNO, POR FIN ACEPTA CRISIS, PERO…
Desde hace un buen de ayeres, la gente sabe el secreto a voces: el COVID está con enorme fuerza otra vez (incluso tal vez nunca ha estado débil).
El tema acá es y ha sido siempre la postura de un gobierno que, a todas luces, ha manejado las cifras a su antojo.
-Y más cuando hablamos de las elecciones pasadas, donde la actitud del gobierno precisamente fue como si no hubiese pasado absolutamente nada-.
Pues ahora, por fin y con sus ‘bemoles’ el gobernador Rutilio Escandón ha sido el primero que oficialmente ha usado el concepto “tercera oleada”.
Sí, como lo lee, cuando las cosas están otra vez terriblemente mal, el mismo ejecutivo estatal ha salido a decir que Chiapas vive la tercera oleada.
Uno se pone a pensar después de eso, cuánto mal estaremos para que salga quien ha estado muy positivo con la situación negativa a aceptar las cosas.
Sin embargo, esa revelación oficial no vino con toda la honestidad que esperábamos para corregir muchos escenarios.
Llegó de hecho con un ápice de números, por así decirlo, trucados que sólo sirven para que los imprudentes sigan siendo más imprudentes.
Dice el ejecutivo estatal, como celebrando una situación poco comprensible, que el Coronavirus en Chiapas está controlado.
Pero se aventuró a ir incluso más allá: aseguró que la ocupación hospitalaria en Chiapas es del 22 por ciento, nada más.
Lea bien lo que le acabo de escribir: según la máxima autoridad estatal, en Chiapas sólo dos de 10 camas están ocupadas con enfermos de COVID.
No hace mucho, se manifestaban afuera del hospital COVID en Tuxtla Gutiérrez, donde los trabajadores aseguraban un cansancio extremo por todas las condiciones que están viviendo.
Una de ellas es la saturación que tienen precisamente los hospitales del rubro y que prácticamente no tienen ya dónde poner a más personas.
Algo similar sucede en Comitán desde hace varios días: los trabajadores han dicho entre sus círculos (aunque nunca de manera oficial) que las cosas están mal y ya no se daban abasto con la cantidad de personas que llegaban.
De hecho y es pertinente mencionarlo, personas que ya se habían vacunado resultaron enfermas y hoy enfrentan un proceso de muchísima gravedad.
Seguramente más de uno pensará que las declaraciones de un gobernador no determina el comportamiento social.
Pueda ser que sí, aunque también es más seguro que no.
Me explico: si la autoridad reconoce lo mal que está la situación, sin duda alguna solicita el cambio de color en el semáforo epidemiológico, nos dejamos de sandeces y con ello se restringen muchísimas cosas.
Pero entonces sucede lo de Chiapas: un estado que está muy mal, donde la autoridad reconoce tercera oleada pero disfraza sus números, seguimos en verde y todo continúa como que si ya hubiésemos vencido al cochino virus.
Queda claro y sigo insistiendo en ello: sólo nos tenemos a nosotros, así que por favor, sígase cuidando y no sea imprudente.
Escríbame a letra.capitalcomitan@gmail.com